No sabes como me costó dejarte ir,
como pude admitir que ya no estarías aquí,
que mi corazón se estramecería,
que mi corazón se marchitaría,
Inocencia que siempre me has acompañado
has dejado de atarme para poder volar
para partir al lugar donde siempre queria estar.
Desplegué mis alas dejando atrás el pasado,
el dolor, la importancia de lo que no tenía,
el orgullo de quién me hería,
y la sabiduría de quién me hundía.
Comencé a correr fuera del campo del miedo,
de la orilla del rencor,
y del camino de mi destrucción.
Los que nunca han estado, estando,
los que dejandome de lado eran de mi sangre
los que haciendome sentir mal, eran mi familia
los que por culpa de ellos caí "sus brazos"
Hundida ante un espejo que me dictaba,
que me obligaba a ser quién no era,
que me retorcía mirandome con esos ojos,
ojos que en la mentira me juzgaban.
Inseguridad, sigues estando en mi,
sigues persiguiendo mi destino,
intentando demoler mi castillo
de sueños que jamás se harán realidad.
Un día podré contigo,
un día me desharé de ti,
un día escaparé de tus garras
para sentirme libre de verdad...
Pero aparte de todo mi caminar,
veo tu luz, abrí mi puerta, y pudiste entrar,
alcé mi cabeza y cada día de mi vida
una batalla que ganar...
Suspiros que se combierten en palabras,
Hechos que me han podido derrotar,
Ilusiones que se han desmoronado
Con el simple fin de poderme realizar...
Y ahora aunque una montaña sea alta la voy a escalar
aunque mi oceano sea profundo lo voy a nadar
por que he aprendido a confiar en tí,
por que he aprendido a seguirte a tí.
Janira...